Trekking El Chaltén

Trekking El Chaltén

Trekking en El Chaltén: Donde la Patagonia se Vive a Pleno

Enclavado en un remoto valle glaciar al pie de los míticos cerros Fitz Roy y Torre, el pequeño pueblo de El Chaltén se ha convertido en la capital nacional del trekking y vida al aire libre en Argentina. Desde este apacible asentamiento de poco más de 1.000 habitantes, los amantes de las caminatas por senderos naturales tienen acceso a una infinidad de circuitos y travesías que llevan a explorar algunos de los rincones montañosos más vírgenes e impresionantes de la Patagonia austral.

El Monte Fitz Roy y Sus Icónicas Agujas

Sin duda, el gran atractivo que atrae a miles de trekkers cada temporada es el Monte Fitz Roy, con sus descomunales paredes graníticas cubiertas de glaciares colgantes. A solo 18 kilómetros del pueblo, esta emblemática cumbre de 3.375 metros se eleva conformando un conjunto de enormes agujas de roca desnuda que desafían la imaginación.

El circuito trekking más famoso para apreciar las aristas del Fitz Roy es el Sendero al Campamento Rio Blanco, una travesía de 4 días y 3 noches hasta los miradores naturales con las mejores vistas. Poder contemplar en vivo ese frente vertical de picos eternamente nevados, hacen de esta caminata una experiencia verdaderamente única.

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El Desafío del Cerro Torre

Muy cerca del Fitz Roy se alza otro de los grandes iconos del trekking en El Chaltén: el temido Cerro Torre. Con sus 3.102 metros de altura y características aristas cubiertas de hielo, esta cumbre de granito es considerada una de las rutas de escalada técnica más complejas y peligrosas del mundo para el alpinismo extremo.

Para los trekkers, la posibilidad de admirar las imponentes paredes del Cerro Torre es mediante el Sendero al Mirador Maestri, una exigente pero gratificante caminata de solo ida y vuelta. Desde ese mirador natural, las vistas del casquete colgante de la cumbre y sus verticales corredores de hielo son simplemente de otro mundo.

Valles y Lagunas de Ensueño

Más allá de los grandes iconos rocosos, la región de El Chaltén ofrece una red infinita de senderos y circuitos de trekking que llevan a explorar paisajes de ensueño de valles glaciares, ventisqueros, lagos y lagunas de colores increíbles producto del particulado mineral glacial.

Entre los circuitos más destacados están el de los Cóndores y las Aguas, donde se pueden avistar aves rapaces en pleno vuelo bajo las paredes graníticas del macizo. O la Laguna de los Tres, un espejo líquido turquesa rodeado por un anfiteatro de granito donde se refleja la imponente faz del Fitz Roy.

La Ruta 40 y el Corredor Bioceánico

Una experiencia aparte para disfrutar de la riqueza escénica del trekking en El Chaltén es recorrer tramos de la legendaria Ruta 40, el corredor bioceánico de la Patagonia. Este camino de ripio atraviesa el área protegida serpenteando entre enormes cerros, valles fluvioglaciares y bosques añosos de lengas y ñires.

La manera más plena de vivirlo es contratar excursiones en vehículos 4×4 que paren en distintos puntos para realizar caminatas que conectan con senderos troncales como el famoso Huemul o Gorge Eléctrico. Desde la ruta es posible admirar paisajes semidesérticos e infinitas cumbres nevadas que contrastan con los verdes campos.

El Refugio de la Vida Silvestre

Otra razón por la que El Chaltén es tan atractivo para el trekking es por la riqueza de su vida silvestre. En estos valles y bosques remotos aún habitan especies tan carismáticas como huemules, guanacos, cóndores y hasta pumas entre las laderas escondidas de los cerros.

Avanzar a paso lento y en silencio por los senderos naturales es la única manera de poder conectar con esta frágil fauna y avistar animales en su hábitat prístino. Los propios trekkers expertos y andinistas que arriban al pueblo son una valiosa fuente de información para conocer las mejores rutas con avistamientos.

El Chaltén es sin duda el punto de partida ideal para los amantes del trekking y la vida al aire libre que buscan explorar la Patagonia más remota y virgen. Caminar entre glaciares y paredes de granito infinitas, dormir bajo las estrellas más brillantes del hemisferio, y conectar con una naturaleza pura e indómita, son experiencias que difícilmente puedan olvidarse.